domingo, 24 de abril de 2011

Camino rastrero


Caminando a paso agotado, arrastraba a su pequeño compañero que deambulaba sin conciencia. No podía abandonarlo. Debían de seguir los 2 juntos aunque eso significase el fin de toda la campaña. Por ello, ambos habían decidido unirse para compartir fuerzas mutuas en los momentos de flaqueza, la técnica había funcionado durante la primera década, pero los continuos obstáculos y peleas los habían debilitado demasiado. Ya quedaba poco cuando ambos se desplomaron, la energía se les había acabado y no bastaba para continuar y culminar así su largo camino. Tirado en el piso, el más grande recordó los inicios, fáciles y simples comparado con lo que habían sufrido ambos. A su vez se estremeció al pensar que iban a fallar, quedando tan poco por recorrer. El pequeño, inconsciente por el trayecto, soñaba estar en su utopía, descansando en su hogar luego de haber llegado exhausto a lo que era su esperado destino, el que siguió por años con esmero y afán, resistiendo los peores infortunios, de aquellos inimaginables. Mientras reposaba en su cómodo lecho, bajo la luz y el calor de las velas, junto a una bandeja llena de los mas preciados y suculentos manjares, recordaba como llegaron juntos.
Con su último aliento se levantaron y marcharon a paso unísono y determinado hasta cumplir su meta.
Levantó la vista y vio a su amigo a los ojos y descifró la tranquilidad que éstos reflejaban, mientras le acariciaba su cabeza y le decía: Lo logramos, lo logramos.

1 comentario:

  1. Exelente niz muy buen cuento! lograste crear varias viciones :B. Bueno que estes bien nos vemos!
    Como diria un pirata: Yo ho!!! :D

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