lunes, 1 de noviembre de 2010

día de las bestias

"Postura encorvada que denotaba una fuerte e inhumana espalda, moldeada con el peso del horror, poderosos brazos cortos terminados en graciados dedos adornados por bellas garras gastadas de tanto rasgar el suelo. Torso hundido producto de la de desesperación y angustia por encontrar a los suyos, un cuello corto sujeta su cabeza, dos amormalados colmillos sobresalientes de su marcada mandíbula inferior dejaban resaltar una pequeña nariz negra, orejas de lobo, las cuales se admiraban firmes en los costados. El fornido cuerpo cubierto de un pelaje oscuro que reluce a la luz de la noche, la cola, su cola de lobo esponjosa.
Lo mas impresionante, los ojos amarillentos y verdosos dan cuenta del animal, pero en el fondo, una negra pupila delata su identidad, y refleja la simplicidad del sufrimiento del licántropo. Por tanto tiempo buscando el consuelo de sus actos, denominados como crímenes por los incomprensores, se cobija en la noche y huye del día.
Todos llegamos a tener miedo alguna vez, incluso a los hijos de la noche."

No hay comentarios:

Publicar un comentario